El viernes 4 de diciembre se realizó en el auditorio del ICA Quindío la sexta mesa de trabajo para la protección a los polinizadores, integrada por representantes de la Secretaría de Agricultura de Armenia, la Corporación Autónoma Regional del Quindío –CRQ-, la Secretaría de Salud Pública, la Universidad del Quindío y algunas entidades que representan a los apicultores del Quindío como Fedeabejas, API Quindío y Asogrocordillera.

La investigadora, Lina Marcela Léon Gallón, PhD, representante de la Universidad del Quindío en esta instancia informó que “En mayo de este año nació la iniciativa desde el Instituto Colombiano Agropecuario ICA y la Procuraduría de Armenia para conformar esta mesa de trabajo encaminada a la protección de los polinizadores, teniendo en cuenta la problemática que se ha venido presentado desde hace algunos años en nuestro departamento, que tiene que ver con la masiva mortandad de estos insectos himenópteros.”
La investigadora uniquindiana, con doctorado en Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Rio Cuarto de Argentina, agregó: “Es necesario tener en cuenta que en Colombia, desde el año 2012, se han reportado un número creciente de episodios de muerte de abejas, atribuibles al uso indiscriminado de agroquímicos aplicados en diferentes cultivos. El Quindío es uno de los departamentos en donde se han presentado las cifras más altas, según reportes de apicultores a diferentes autoridades ambientales.”

Desde el Laboratorio de Plaguicidas y Salud de la Universidad del Quindío se ha venido realizando un acompañamiento a los apicultores a nivel regional y nacional para conocer algunas de las moléculas que están afectando a las abejas y al medio ambiente, sin embargo, “como el Laboratorio de Plaguicidas y Salud aún no se ha acreditado, los resultados no son válidos para realizar un proceso legal aun cuando se evidencien residuos de plaguicidas en los estudios realizados”, agregó la experta.

Teniendo en cuenta la importancia de los resultados de Laboratorio, el ICA y Agrosavia firmaron un convenio a partir del mes de junio de este año para atender casos de mortandad de abejas en el país, apoyados por Laboratorios Acreditados. Este trabajo comienza desde el acompañamiento en la toma de muestra, manteniendo la cadena de custodia hasta su envío al respectivo laboratorio.

Con relación a la última sesión de esta mesa que buscar proteger y preservar a las abejas como polinizadores y especie esencial en la conservación del medio ambiente y factor determinante para el equilibrio de la biodiversidad, la investigadora León Gallón, destacó: “En la sexta mesa apícola realizada el 4 de diciembre se concluyó que durante el año 2020 se denunciaron 11 episodios de envenenamientos en el Quindío ante el ICA Armenia, correspondientes a 212 colmenas, es decir 17 millones de abejas. De estos once (11) casos, cinco (5) fueron atendidos con toma de muestra y análisis de laboratorio, encontrando la molécula Fipronil en todas las muestras analizadas.”
El Fipronil es un insecticida, que según el laboratorio farmacéutico Vecol, “actúa por contacto e ingestión sobre diversas plagas”. Además “proporciona un tiempo prolongado de efectivo control de las plagas”.

En la Mesa de Protección a los Polinizadores “Se resaltó el impacto positivo que ha tenido la formación de esta instancia interinstitucional articulada con los actores participantes, además de brindar el apoyo no solo a los apicultores sino en la tarea de concientizar a los agricultores sobre los efectos negativos que tienen las malas prácticas agrícolas sobre el medio ambiente”, sostuvo la experta uniquindiana.
Es valiosa y destacable la labor de esta mesa sectorial para la preservación de la vida. A propósito, y luego de los esfuerzos de apicultores con el acompañamiento científico de la Universidad del Quindío, por lograr legislación desde el Congreso de la República que proteja a los antófilos, también se apoya a nivel local el Proyecto de Ordenanza Nro. 030 de 2020 que declara a las abejas como insectos de interés social económico y ecológico.